Demasiado que limpiar
La tarea se les estaba complicando paso a paso y cada vez lo veían todo más negro, parecía que los trabajos de limpieza no iban a acabar nunca y eso que acaban de empezar, algunos se estaban desesperando de pensar en todo lo que les quedaba por delante pero ya no había marcha atrás, había que limpiarlo todo. El plan que habían trazado ya no les servía, necesitaban uno nuevo puesto que había cosas como los coches que no podían sacar de allí sin la ayuda de una grúa.

Demasiado que limpiar
Un cuadro macabro
Nadie de los presentes podía creer lo que tenía ante sus ojos, era como si estuvieran delante de un cuadro macabro de alguna escena del fin del mundo. Ese no era su París y no podían permitir que aquello continuase así. Debían poner todo su empeño en terminar el trabajo y que no se volviese a repetir cuidando de su ciudad todos y cada uno de los habitantes de ella.

Un cuadro macabro